Las vidas de los inmigrantes utilizadas como peones

Las vidas de los inmigrantes utilizadas como peones

La frontera entre Polonia y Bielorrusia lleva más de un año en conflicto y no parece que vaya a cesar

Adrián GARCÍA

La tensión entre el gobierno bielorruso y la Unión Europea cada vez es más alarmante. El motivo de dicha pugna son las múltiples oleadas de civiles que huyen de sus países para entrar en Bielorrusia. Después se dirigen a la frontera con Polonia para intentar cruzarla. Debido a la negativa del principal órgano europeo de permitir el paso a los inmigrantes, la situación se ha vuelto insostenible y los muertos empiezan a poder contarse con más de dos manos.

Este conflicto tiene su origen en las elecciones a la presidencia de Bielorrusia celebradas en agosto de 2020. Alexandr Lukashenko salió victorioso pero no exento de polémica. Una gran cantidad de ciudadanos bielorrusos no estaban de acuerdo con el resultado y estaban seguros de que hubo un amaño. Ante esto, el pueblo salió a la calle a protestar y la represión que recibieron por parte del nuevo Gobierno fue tal que tuvo que interceder la Unión Europea.

Bielorrusia fue expulsada de la asociación oriental establecida entre los países orientales y la Unión Europea.  Alexandr Lukashenko y los miembros de su partido fueron sancionados por el mencionado órgano. Este fue un punto de inflexión para el nuevo presidente ya que según el había sido maltratado y no iba a dejar que las cosas se quedarán así. 

A partir de este castigo, el paso de inmigrantes por Bielorrusia para ir a otros países fronterizos se ha vuelto más habitual. En los últimos tres meses más de 1600 personas han llegado al país liderado por Alexandr Lukashenko procedentes de Kuridistán Iraquí. Los que más civiles han recibido son Lituania, Letonia y en mi primer lugar Polonia. La frontera que hay con este país se encuentra en una situación en la que cada vez hay más personas y las muertes están aumentando.

Campamento de migrantes abandonado en la frontera bielorrusa-polaca en la región de Grodno 

Todo esto ha desembocado en el Estado de Emergencia impuesto en esta frontera el pasado 2 de septiembre. Esto implica que se prohíbe el paso a Polonia a los no residentes y a los periodistas. Además se han desplazado 2.000 soldados y han puesto una valla de alambre para detener la llegada de civiles. Aún así los inmigrantes han seguido dirigiéndose aquí y la Unión Europea se ha visto obligada a volver a intervenir. Dicho órgano ha restringido el el ingreso a Bielorrusia y le ha acusado de utilizar a los inmigrantes como piezas de una estrategia política. Como era de esperar Alexandr Lukashenko lo ha negado y ha declarado que no iba a obedecer a la Unión Europea. 

En este último mes se han concentrado alrededor de 4.000 civiles en la frontera entre Bielorrusia y Polonia para entrar en este país. Las fuerzas del orden polacas se han visto obligadas a actuar deteniendo a un centenar de personas. Sin embargo la mayor desgracia de este conflicto son los 11 inmigrantes que han perdido la vida (según los grupos de ayuda) en busca de eso mismo, una vida. No parece que ninguna de las partes vayan a llegar a un acuerdo por el momento, así que desde aquí solo se puede seguir lamentando los fallecidos.