Estados Unidos te mata y la culpa es del dron

Estados Unidos te mata y la culpa es del dron

Los norteamericanos asesinaron a diez civiles inocentes en Kabul el pasado 29 de agosto en un ataque con un dron. Las víctimas, entre ellas siete niños de entre dos y diez años, se encontraban en un autobús cuando Estados Unidos lo bombardeó. El motivo de este atentado fue que pensaban que el conductor del vehículo, Zemari Ahmadi, era miembro del Estado Islámico cuando en realidad formaba parte de una ONG estadounidense.

Adrián GARCÍA

Farzad, Ayat, Malika, Faisal, Sumaya y los hermanos Benyamin y Armin. Siete nombres. Siete niños de entre dos y diez años que junto a Zemari Ahmadi y otros dos civiles fueron producto de lo que los responsables denominan como "error". Solo son unos pocos más que se suman a la larga lista de víctimas a manos de la manera más cómoda de atacar sin tener que emplear ningún soldado. No es otra que a través de los drones.

Desde 2002 los Estados Unidos llevan empleando estos vehículos aéreos sin tripular como arma para rastrear, identificar y asesinar a los que ellos consideran sus enemigos. El más reciente sucedió el 29 de agosto de este año en Kabul, Afganistán. Un autobús conducido por Zemari Ahmadi, trabajador de una ONG estadounidense (si, estadounidense) fue bombardeado por un dron pilotado por la fuerza militar norteamericana.

La razón de este ataque fue la creencia, y según ellos la certeza, de que en ese vehículo había militantes del grupo EI (Estado Islámico). Es decir, confundieron a siete niños y a un trabajador de una de sus ONG con unos terroristas. La situación se convierte más surrealista cuando esta información se conoce más de dos meses después de suceder. Si bien es cierto que es un acontecimiento digno de aparecer en la apertura de muchos telediarios, no es otro más de un registro de "errores" de este tipo.
Imagen: Zemari Ahmadi posando para una foto

Me gustaría centrarme en Estados Unidos ya que es el principal país que utiliza los drones como una herramienta militar. Para poder realizar bien este análisis tenemos que retomarnos al origen de todo: el 11-S. 

Cuando este atentado terrorista, considerado como uno de los mayores de toda la historia, se llevó a cabo, las ganas de venganza fueron inimaginables. En nombre de los más de 3.000 asesinados, los Estados Unidos iniciaron un asedio inagotable que a día de hoy continúa. Las invasiones a países como Irak, las detenciones en Guantánamo o los ataques a Afganistán son todo parte de un conflicto denominado por los estadounidenses como "guerra contra el terror"

Podemos ver que los norteamericanos no controlan mucho sobre el uso de las preposiciones ya que dicen "guerra contra el terror" cuando debería de ser "guerra para el terrorismo". A los hechos me remito. Según un estudio realizado por la compañía Airwars (compañía que rastrea y archiva la guerra aérea internacional contra el Estado Islámico) los Estados Unidos han matado a más de 22.000 civiles inocentes desde el 11-S. Esto quiere decir que por lo menos 22.000 vidas han sido arrebatadas a manos de un puñado de informáticos con trajes militares que obedecían órdenes de otro puñado de individuos con trajes militares pero con estrellitas. 

Hay que aclarar que estos datos no son del todo precisos ya que el conteo oficial lo lleva el propio país estadounidense. Aunque ellos niegan tener ningún tipo de información sobre la cantidad de civiles muertos a causa de sus ataques ya que " involucra a diversas operaciones/campañas en un tiempo de 18 a 20 años". 

Tras la publicación de este tipo de "errores" siempre sale algún dirigente norteamericano a pedir disculpas y decir que compensaran económicamente a las familias de las víctimas. En este caso el general Kenneth F. McKenzie, jefe del Mando central de los Estados Unidos, salió en una rueda de prensa pidiendo perdón y afirmando que ayudaran a los más allegados de los fallecidos. Ante esto a mi me gustaría saber de que manera pretenden ayudar a esta gente ya que lo más probable es que dentro de no mucho otro dron atente contra sus vidas.

Farzad, Ayat, Malika, Faisal, Sumaya y los hermanos Benyamin y Armin. Te vuelvo a recordar estos nombres ya que lo más probable es que después de leer esto se te hayan olvidado. A lo mejor ni te has esforzado en recordarlos al verlos o solamente los has leído de carrerilla. Siete nombres que se suman a lista interminable de, sin uso de eufemismos, asesinatos de inocentes a manos de los Estados Unidos. 

Imagen: Farzad, Ayat, Malika, Faisal, Sumaya y los hermanos Benyamin y Armin

La única vía por la cual yo, desde el salón de mi casa, veo factible para acabar con esta masacre de inocentes sin sentido es deteniendo los ataques con drones. Son mortales y violentos a la par que imprecisos. Es imposible determinar con exactitud cuál va a ser el resultado después de apretar el "enter" o la barra espaciadora. Si bien es cierto que el actual presidente Joe Biden ha declarado la reducción de estos asaltos, no parece que vayan a cesar en mucho tiempo.